Por: Víctor Torres Montalvo / Twitter: @motinsitepegas
El profesorado de la Universidad de Puerto Rico (UPR) expresó estar “molesto” con la persistencia de los recortes que la Junta de Control Fiscal (JCF) y el gobierno de Ricardo Rosselló Nevares quiere hacerle al sistema público de educación superior del país, según dos portavoces de dos organizaciones universitarias.
José Raúl Rivera Caballero, presidente de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU) y Erol Luis Montes Pizzarro, portavoz del Colectivo de Docentes en Movimiento Solidario (DeMOS), expresaron hoy —minutos antes de que comenzara la Asamblea de Profesores en el Coliseo Municipal de Cayey— que, incluso los docentes que no apoyan la huelga como mecanismo de lucha, están indignados con los ajustes.
“Realmente toda la facultad de la Universidad, incluso los que se oponen a la huelga como estrategia de lucha —porque hay que reconocer que hay sectores de los docentes que no favorecen la huelga y el cierre de los portones, y que están a favor de las demandas que le están haciendo a los estudiantes— están bien molestos”, expresó Montes Pizzarro.
“Es bien importante recordar que, según la Middle States Commission on Higher Education (MSCHE), el peligro más grande en la Universidad no es la huelga. Aquí nunca se ha perdido un año académico, nunca, por las luchas estudiantiles, docentes o de la Hermandad [de Empleados Exentos No Docentes] en la década de los ’70. Sin embargo, sí podemos perder campuses y programas completos por los recortes”, añadió el docente de UPR en Cayey.
Igualmente, Rivera Caballero conicidió con su compañero y apuntó que el principio de los recortes es “errado” y sin fundamento; no toma en cuenta el aporte social y económico que la UPR tiene sobre el país.
“La política que está imponiendo la JCF, y con la cual está colaborando el gobierno, es una política basada en la ideología del neoliberalismo, que contradice la evidencia empírica de 40 o 50 años. Estas medidas se han tomado en muchos otros países, en América Latina, en Asia, en Europa. Vemos el caso de Grecia, España, Portugal o Chile. El mismo Fondo Monetario Internacional, que en el pasado, y todavía hoy, se reconoce como uno de los portavoces de esta política, ha tenido que reconocer, en un estudio, que la política de austeridad en las crisis económicas empeora la economía”, criticó el presidente de la APPU.
“No es una solución al problema de desarrollo económico, que es el problema principal”, continuó.
Rivera Caballero argumentó que la UPR tiene un multiplicador fiscal —sistema que reproduce el dinero que se le introduce a un sector de la economía en otros— “bien alto” en la salud y la educación. Cada dólar que se fomenta en la academia pública aumenta a tres dólares en otros puntos socioeconómicos, de acuerdo con el también profesor de Humanidades en UPR en Carolina.
“No se trata de que nos quitan más o nos quitan menos, [pero] sí hay que preguntarnos por qué a la UPR se le quiere quitar el 64% de su presupuesto. Esto es una agenda ideológica en contra de lo que es un foco de resistencia en contra de las políticas de austeridad”, continuó el líder sindical.
La asamblea de los profesores incluye a la Escuela de Artes Plásticas y Diseño (EAPD) y al Conservatorio de Música de Puerto Rico (CMPR).
Tiene como agenda: la presentación de las organizaciones y el propósito del cónclave; la aprobación de reglas de debate; la lectura de la declaración conjunta de las organizaciones; la discusión de la declaración; mociones; y plan de acción.
Mientras los docentes se reúnen, el recinto de la UPR en Cayey también está decidiendo —hoy en Asamblea General de Estudiantes— la próxima acción que tomará en torno a la huelga, o si desisten de continuar con los portones cerrados.
La decisión que los toros y toras tomen afectará mucho al Sistema UPR, dado a que Cayey ha sido uno de los recintos que más acción ha tenido en días recientes.
Actualmente, la UPR en Carolina y en Utuado, por votación en asamblea, abandonaron la huelga en sus perímetros. Sin embargo, sus respectivos Movimientos Estudiantiles rechazaron ambas decisiones al señalar manipulación de votos y problemas parlamentarios, tachando ambas asamblea estudiantiles de “ilegítimas”.