Año tras año, llega la noche del 31 de octubre y todas las fiestas adyacentes a esta fecha deslumbradas de disfraces nuevos. Algunos hacen referencia a los memes más candentes del año o sino a figuras de las series, películas, y animaciones más vistas.
A pesar de toda la creatividad que se puede conjurar para un disfraz, siempre hay personas que, consistentemente, se disfrazan de una forma que es culturalmente insensible. Las personas que se supone que estén representadas se sienten ridiculizadas, marginadas, y hasta discriminadas.
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Maquillaje de calavera o ‘’Catrina’’
Es un disfraz accesible, por un lado, y por otro, su valor estético es digno de admirar. Sin embargo, mientras que es solo un disfraz para muchos, para los mexicanos, es parte de una celebración sagrada.
Miles de mexicanos se pintan las caras con maquillaje de calavera o catrina en honor a sus familiares difuntos en el Día de los Muertos. Junto al maquillaje, se crean calaveras de caña de azúcar o de arcilla que se colocan como ofrendas sobre altares. Se cree que los familiares, durante el periodo del 1 y 2 de noviembre, visitan estos altares y disfrutan de estas ofrendas.
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Americanos nativos.
Los estereotipos perpetuados de la cultura de los americanos nativos a menudo surgen de las películas de vaquero. Estos filmes pretendían representarlos como poco civilizados, violentos, y figuras negativas que se oponían a las metas de los vaqueros.
En realidad, todas estas películas —o el grueso de ellas— buscaban promover la Doctrina Monroe y la Doctrina del destino manifiesto. En ambos casos, se justificaban discursos que permitieron allanar la marginación de los americanos nativos y expulsarlos de sus territorios, para luego colocarlos en comunidades segregadas.
Asimismo, los sombreros de guerra son ofensivos como disfraces porque son símbolos de respeto, y se otorgan a los miembros más destacados de las tribus. Hay muchísima diversidad dentro de las comunidades americanas nativas, y los disfraces no logran representarlas.
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Caricaturas racistas
Tanto el blackface como el yellowface no deberían considerarse disfraces válidos. Han servido como herramientas que han apeligrado, ridiculizado, y marginado a minorías raciales durante décadas. Han contribuido a discursos ideológicos peligrosos, por lo tanto, no son ni serán aptos como disfraces.
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Mujeres orientales fetichizadas
El orientalismo se refiere a una noción estética y cultural acerca de las culturas orientales. Las mujeres orientales a menudo se han concebido como ‘’exóticas’’, o ‘’naturalmente sensuales’’.
Se suelen representar a las mujeres orientales como sexualmente activas aún con ropa que no se utilizaría en actos sexuales. Las tiendas de disfraces a menudo venden estos disfraces hipersexualizados e ignoran que estas vestimentas no tienen una dimensión sexual en esas culturas.
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Disfraces que se mofan de la salud mental
A la luz de la película Joker, se verán muchas personas vestidas con el maquillaje emblemático del villano-antihéroe y, posiblemente, mofándose de la circunstancias que el personaje perduró. Muchos disfraces más dañinos para la imagen de las personas que tienen condiciones de salud mental podrían aparecer. En dicho caso, hay que reconocer la línea entre homenaje y representación ofensiva hacia una población.
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Disfraces de orientación sexual y/o identidad de género
Cada persona, independiente de su identidad, carga consigo una personalidad, un andamiaje cultural y personal. Si el punto del disfraz es reducir una persona de una identidad a la forma que se visten, deberías retirarlo.